Zallak aldundiari eskatu dio Zallako Eguzki egoitzarekin sinatutako hitzarmena benetako kostura egokitu dezala // Zalla insta a Diputación a que adecúe el convenio firmado con la residencia Zallako Eguzki a su coste real

A principios de este mes de marzo, el Organismo Autónomo Local de la residencia Zallako Eguzki suscribía un convenio para 2018 con la Diputación Foral de Bizkaia, de forma que la mitad de las plazas puedan ser ocupadas por personas derivadas por la institución foral. Aunque la firma de dicho convenio salía finalmente adelante, en la Junta Rectora de la residencia se desgranaron las razones por las cuales este convenio no cubre el coste real que suponen esas plazas ni soluciona la situación de ocupación parcial que tiene el centro.

En primer lugar, cabe señalar que se trata de un acuerdo que se firma anualmente, desde 2006, y que supone que de las 58 plazas existentes en Zalla, el ente foral se reserva un número determinado a su favor a un precio/plaza/día. Tras la entrada en vigor del decreto 185/2015 de cartera de prestaciones y servicios del Sistema Vasco de Servicios Sociales, se realiza un proceso de regulación extraordinario, para que todas aquellas personas usuarias ingresadas en centros de titularidad municipal, a fecha 26 de diciembre de 2016, que tuviesen un grado de dependencia reconocido II y III pasasen a ocupar plaza pública foral. Esto es así porque a partir de este momento es competencia exclusivamente foral la atención de estas personas residentes. 

Este cambio en el número de plazas supuso también un incremento en el precio/plaza/día que paga la Diputación por persona usuaria, pasando de 77,88€/día a 81€/día. Sin embargo, esta cantidad resulta insuficiente para cubrir el coste real del servicio, ya que la liquidación del ejercicio 2017 arroja un coste real de 88,83€/día en caso de ocupación total de las plazas todos los días del año. 

Así las cosas, en el pasado ejercicio el coste real de las plazas convenidas con Diputación ha sido 112.729,92€ superior al precio que realmente abona el organismo foral, dinero que han aportado las arcas municipales. "Debemos considerar también el coste de las plazas convenidas vacías, que Diputación Foral no abona a pesar de ser ellos los responsables de ocuparlas", matizan desde el Ayuntamiento. "De ahí -añaden- la importancia de que todas las partes hagan lo necesario para hacer sostenible la residencia, tratando de ocupar las plazas que están libres".

Informe de Intervención

Tal y como se señalaba anteriormente, en la Junta Rectora de la residencia celebrada el 9 de marzo, además de aprobar la liquidación del presupuesto de 2017, se acordaba también suscribir el convenio con Diputación, aunque desde el Consistorio se daba cuenta de una serie de informes, tanto de Intervención como de Secretaría, en los que se cuestionan algunos aspectos que se recogen en el citado acuerdo. Por parte de Intervención, se indica que la aportación total del Consistorio a la residencia Zallako Eguzki en el ejercicio 2017, en base a los presupuestos aprobados ese año, asciende a 457.600€. Sin embargo, "dado que las necesidades de liquidez de la residencia han sido superiores a esa consignación presupuestaria, se ha añadido a la cantidad anterior un total 31.000€ provenientes del remanente de tesorería para financiar el gasto corriente". "Esto significa que más de un cuarto del presupuesto de la residencia es aportado por el Ayuntamiento de Zalla, concretamente 488.600€, lo que supone la mayor cantidad que ha aportado nunca el Consistorio en toda la historia de la residencia, a pesar de que desde 2016 sea una competencia foral y/o mancomunada", explicaba el concejal de Acción Social, José Félix Saráchaga. "No evadimos las responsabilidades municipales pero exigimos al resto de instituciones, Diputación y Mancomunidad, que cumplan con sus obligaciones", añadía.

Informe de Secretaría

Además, en esa Junta Rectora también se presentaba otro informe de Secretaría en el que, entre otras cosas, se indica que "las entidades locales no deben asumir competencias que no les atribuye la ley y para las que no cuenten con financiación adecuada". Al mismo tiempo, se argumenta que "no existe una memoria elaborada por parte de Diputación en la que conste la motivación del coste que impone en el convenio. Mientras que la residencia sí aporta datos que justifican un precio/plaza/día diferente al fijado por el ente foral". Al hilo de esta cuestión, el informe indica que no se cumple el principio de estabilidad presupuestaria, "ya que el precio/plaza/día recogido en el convenio a suscribir es menor que el fijado en la memoria, por lo que el déficit financiero derivado de la prestación de servicios forales ha de compensarse con aportaciones a realizar por parte del Ayuntamiento a la residencia". "Por lo tanto, -concluye- la firma del convenio no se ajusta a derecho".

EAJ-PNV, a favor del convenio

Desde EAJ-PNV se mostraban a favor de suscribir el convenio con Diputación, independientemente de la diferencia entre coste real y lo que aporta el ente foral. "Discrepamos en que la Diputación tenga la obligación de prestar estos servicios en Zalla. El derecho subjetivo es de la persona y es ella, y no el organismo foral, quien decide dónde acudir", señalaba Irene Pardo. Desde la formación jeltzale aseguraban, por una parte, que a diferencia de lo que parece ocurrir en Zalla, en otras residencias de Bizkaia sí es asumible el balance económico con lo que aporta Diputación y, por otra, que sí es obligación del Ayuntamiento mantener y gestionar la residencia. Planteaban, además, que el Consistorio haga gestiones para resolver la problemática y atraer a más residentes.

Por parte del equipo de gobierno, se remarcaba el hecho de que hasta el año 2010 Diputación sí dotaba con ayudas económicas específicas para el mantenimiento e inversión en las residencias. Y, en otro orden de cosas, se comentaba que el servicio primario es competencia de Mancomunidad, aunque desde EAJ-PNV se volvía a insistir en que la competencia es municipal, pero que se delega en la Mancomunidad de Las Encartaciones. 

Sobre esta cuestión, es la Ley de Servicios Sociales la que delimita la competencia de cada nivel de las Administraciones Públicas respecto a los servicios y prestaciones de obligada provisión. Así, se establecen como servicios de Atención Primaria, de competencia de los ayuntamientos -que en nuestro caso conforman los ayuntamientos de la Mancomunidad de Enkarterri, junto con Alonsotegi-, los recursos de alojamiento a personas mayores, en situación de Dependencia Grado I; y como servicios de Atención Secundaria, de competencia foral, los centros de alojamiento para personas mayores con Grado de Dependencia II y III, y con carácter excepcional a personas mayores con Grado I. 

En opinión del alcalde de Zalla, presente también en la Junta, es falso que el servicio de Atención Primaria sea competencia municipal "porque Diputación establece que debemos prestar ese servicio de forma mancomunada, aunque hay dinero propio de Zalla que se ha derivado al ente comarcal para prestar esos servicios".

Propuestas

Para finalizar la Junta, se adoptaban una serie de propuestas. Por parte del equipo de gobierno se proponía aprobar el convenio, a pesar de lo expuesto, "ya que de él depende la continuidad de la residencia". Asimismo, se acordaba notificar a Diputación la situación, instarle a adecuar el convenio al coste efectivo y pedir la inclusión de cláusulas que aseguren el pago anual de ese número de plazas (actualmente 35), independientemente de su ocupación. Por otra parte, se propone instar a la Mancomunidad a que dé los pasos necesarios para derivar usuarios/as a la residencia de Zalla, "tal y como se acordó hace más de un año". Desde el equipo de gobierno se proponía, además, notificar tanto a la dirección del centro como a las áreas municipales que debe realizarse a lo largo de 2018 un cómputo más ajustado del coste efectivo de la residencia, "teniendo en cuenta todos los servicios que se le prestan desde el Ayuntamiento".

Desde EAJ-PNV, por su parte, proponían instar al Consistorio a que haga todo lo posible para eliminar el déficit y aumentar el número de personas residentes. 

Todas estas propuestas se aprobaron por unanimidad.